Bizcochitos para rellenar
Si tenéis ganas de algo dulce, no hay problema. En tan sólo treinta minutos podemos tener unos pequeños bizcochos para rellenar con la buttercream que os enseñé en la entrada anterior, aunque también podríamos usar crema pastelera. Os dejó el enlace donde os explico como hacerla. Si os apetece probar con cualquier otra opción que se os ocurra, ¡adelante!
Buttercream
Quería hacer unas fotos a unos bizcochos pequeños que había hecho unos días antes y que tenía reservados hasta decidir con que cubrirlos. Me daba un miedo enorme enfrentarme a una buttercream, no sólo por no conseguir la consistencia adecuada sino por tener cantidades ingentes de mantequilla y azúcar con la intención únicamente de probarla. Pero bueno, las tentaciones están para caer en ellas. Y allí que me pongo manos a la obra. Tenía unas rosas, regalo de mi buena amiga Nuria, que me apetecía incluir en las fotos. Con todo esto en la cabeza me puse a cocinar.
Gracias, Urban Coffee
Alguna vez me levanto un poco perezosa, pero las ganas de hacer alguna foto me pueden y termino cocinando.
Cuando mi amigo Joan, propietario de Urban Coffee Lounge, me propuso hacer fotos de los productos con que nos deleita cada día, no pude resistirme. ¡Podría hacer muchas fotos sin pasar horas en la cocina! Esto sí que era un regalo. Preparó una bandeja de cosas deliciosas y ricas. No sabía por donde empezar; croissants, pastel de manzana, panecillos integrales…
Read MoreTriffle de queso cottage y arándanos
Me encantan los arándanos, los azules, los rojos, los salvajes, los cultivados, congelados, frescos… Lo cierto es que cuando salimos de viaje siempre aprovecho para comprar en los pequeños puestos callejeros que aparecen de repente. Siempre me hago con varias tarrinas de estos frutos que, la mayoría de las veces, no llegan a casa. Empiezo probando uno y no puedo parar, frescos son deliciosos.
Pad Thai a mi manera
Cuando me apetece comer algo exótico lo que tengo más a mano es el folleto del restaurante chino que tenemos cerca de casa y allá que voy al teléfono para pedir no sé cuántas cosas. Pero la verdad que no me resulta tan sabroso como mi Pad thai, que a veces por pereza me resisto a hacer y, como además siempre quiero sacar alguna foto, la comida se retrasa más de lo habitual.