Aquí estoy de nuevo después de tantos meses… El trabajo diario y el día a día me dejan pocas oportunidades para hacer lo que me gusta: Comer, hacer fotos y cocinar, por este orden, aunque ya os imaginaréis que justo es el orden inverso en el que comienzo mis días de disfrute.
Hoy de nuevo me inclino ante la evidencia: necesito algo rapidito que me quite el mono y me permita hacer alguna foto que comerme después. El plato, no la foto claro está. Una nueva receta LEVEL UP.
Vamos por partes:
En primer lugar, en una de esas visitas al supermercado de las que no nos libramos, sólo tenemos que dar un rápido paseo por el pasillo de los pasteles preparados, bizcochos y otras delicias. Como habréis leido he escrito «rápido» así que, vamos, vamos vamos que nos liamos. Escogéis uno de los que más os guste. A mí me encanta este bizcocho esponjoso y muy delgadito de arándanos. !Al carro!
En segundo lugar al pasillo de las cremas de vainilla, da igual que sean refrigeradas o no. Cuando vamos a IKEA, en su tienda sueca de alimentación, encontramos una crema de vainilla deliciosa y esa es la que voy a usar para elevar a los altares mi receta con truco. En la próxima visita a IKEA no olvidéis visitar la tienda sueca de alimentación y tener provisiones en casa.
En tercer lugar, para terminar, unos cuantos arándanos frescos para dar el punto personal. Casi lo tenemos listo.
BIZCOCHOS CON ARÁNDANOS Y CREMA DE VAINILLA
Ingredientes: 1 Bizcocho Plano de arándanos 1 Brick de Crema de Vainilla 200gr de Arándanos Frescos Instrucciones: 1. Calentar la crema de vainilla en un pequeño recipiente al fuego o en el microondas (con un par de minutos es suficiente). Yo la dejo ligeramente tibia y cubrimos el fondo del plato en que vayamos a servirlo. 2. Cortar las porciones de bizcocho que nos vayamos a comer y colocarlo sobre la crema de vainilla 3. Añadir los arándanos al bizcocho y a disfrutar.
Ya sé que a esto no se le puede llamar cocinar pero es una excusa para comer algo dulce, tomar unas fotos y disfrutar de una merienda en familia sin sufrir demasiado. Poned cara de haber trabajado mucho en la cocina y que os echen flores de lo bien que os ha quedado esta maravilla.
Un beso delicioso.